quinta-feira, 29 de setembro de 2011

Escena de la sangre en un bar .

Escena de la sangre en un bar ...

Esa tarde fue decisiva. Neuza esperaba la llamada de teléfono durante toda la semana, y nada ...

Nada Neuza, nada de amor tantas veces soñado y prometido. Neuza quieren venir a más de la vida misma.

La vida, cómo es la vida? Ama las cosas son transitorias, que pasar el tiempo y el tiempo hace que la gente se olvida.

Olvidar cómo? Las noches, muchas noches, la embriaguez de Neuza, vació su vaso de cerveza en cada momento, la vida pasada en los brazos y los sueños desesperados.

"El amor, cuando es demasiado, al final conduce a la paz", pero no es sólo condujo a la vida.

El tiempo congelado, la vida congelada, el empleo es danara, la esperanza también.

Sólo queda un sabor, la vida Jilo tenía el tono amargo de una existencia sin sentido, no hay paz, no hay futuro.

Sólo quedaba una cosa, la venganza.

La venganza, de todos modos, no importa qué.

La magia de la esperanza se ha convertido en la decepción de perder, la piedra en el pecho con incrustaciones, el alma, en lo que quedaba ...

Para descubrir, más tarde, Neuza que estaba saliendo con un viejo amigo, que se derrumbó por completo.

Él, que había dado tanto apoyo en los momentos difíciles, amigo íntimo, compañero ... El pecho, el cuchillo, la vida corriendo, dando vueltas como una noria en el parque sin la gracia de la infancia recordada, la destrucción de los previamente construida con dedicación y lucha.

La rosa roja, la boca roja, bares, Campari, indefenso, en la dulce noche Amaro.

La piscina tenía que ser el sostén de la familia, las apuestas, los daños y perjuicios de la operación se convirtió en atracones Homero en exceso enorme, donde Neuza corrió, dio la vuelta y la sangre ...

El sabor de la venganza está en la boca, reflexionó, una al norte, de una manera ...

Sabía que iba a Neuza el parque, el bar, el mundo, y esperó.

En un momento, los dos corriendo, girando, sentado en el bar. En la esquina en el bar, la rosa roja sobre la mesa en tela roja, sillas de color rojo, la mesa ...

En el momento final, el cuchillo en alto, toda la vida vino de la pobre niña, el director de recursos humanos, abandonado, tirado ...

Y en un instante, su rostro enrojecido por la embriaguez, la desesperación, el embarazo denota la vida Neuza por venir, la esperanza de que ya no le pertenecía a él y el cuchillo ...

Uno de ellos era suficiente, el objetivo era bueno, la sangre de la boca, el corazón abierto ...

Abra el pecho, en los gritos aterrados de Neuza, y el miedo en el rostro de su novio.

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